Ahora que mis vacaciones se acabaron y fueron equivalentes a una excelente caja de chocolates, puedo decir que pensé mucho, bailé, me reí y asombrosamente el año nuevo me cogió en a ducha y no lloré ni un poquito.
Dentro de todo, tuve tiempo para pensar en una noche en particular de meses atrás.
Me acordé mucho de detalles intrascendentes pero interesantes.
Y podría decirte que a punta de recuerdos, tu olor invadió mi cuarto, sentí otra vez el sabor de tus besos, vi el brillo de tus ojos y me dejé llevar por tu sonrisa.
Sentí tu calor muy cerquita, el tacto de tu pelo, de tu piel...
Y aunque fué el recuerdo de una sola noche, podrí a decir que quisiera que volviera otra vez.
3 comentarios:
benditos sean esos momentos eternos
Moscardón Y que la buena memoria nos acompañe!!!
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