sábado, 9 de julio de 2011

Julio 9 de 2011, 2229

La vida tiene formas extrañas de funcionar.
Esta ha sido la semana de los malos chistes universales. Nada que hacer.
Cuando algo se iba solucionando, otra cosa aflojaba por otro lado.
Esas eventualidades me sacan completamente de quicio. Tienen la capacidad de convertirme en un ser oscuro, malhumorado e histérico. Por más que quiera me es complejo soltar el control sobre ciertos aspectos de mi vida.
Al parecer, sigue siendo la paciencia mi lección de este año.
Primero intentar aprender a tocar piano. Sólo asistí a 4 lecciones, porque...
Mi segundo módulo de paciencia era aguantarme a un jefe insufrible mientras me confirmaban otro empleo, y en esa espera renuncié, pero...
No salió nada porque me estafaron y jugaron con mi amabilidad y me robaron la información del proyecto, entonces...
Empecé a trabajar con un empleo en el que no tenía ninguna experiencia, y...
me dí cuenta que la amistad es mucho más que caerse bien o querer a alguien, y así...
después de que pareciera eso de conseguir pareja un imposible, apareció Alejandro, con quien estamos construyendo una relación hermosa e interesante llena de emociones y subidas y bajadas (No todo es color de rosa, pero ha sido de una tonalidad increíble).
Y aunque mi amado Romeo (WV 1966 color verde aguacate por dentro, alias La Alverja), es una fuente de felicidades infinitas y paseos e historias, ha logrado exigirme tandas infinitas de paciencia, ya que...
mi papá lo mandó a pintar y cuando salió del taller no tenía reversa y tenía los frenos malos, entonces...
Estuvo parado dos meses casi y se le descargó la batería y cuando la compré, ya no quiso prender.
Llamé al mecánico que lo prendió facilísimo después de echarle gasolina al sistema, ya que toda se había ido fuera de éste por haber estado parqueado tanto tiempo, y (la historia mejora)
Subí a mí casa a buscar los papeles para llevarlo al taller y...
Los había echado a la basura una semana antes cuando arreglé el clóset... Tocó sacarles copia y Romeo por fin está en el taller... Aunque no solo hay que arreglarle la reversa sino otras cositas adicionales...
Pero bueno, al menos está en el taller, ya solucioné lo de la plata, las altas y bajas han vuelto a ser altas y aunque está haciendo un calor del demonio, puedo decir que en este momento, sigo aprendiendo de paciencia y, me siento infinitamente feliz!

4 comentarios:

LoReLeiN dijo...

Siempre tendremos cosas por reparar pero ese es el sentido de la vida. Lo importante es que al montarnos a dar un paseo las horas parecen minutos y sabemos que todo se puede. te quieroooo!

Julibelula dijo...

Doña Lore, Rico verla por acá!. Y aunque sea el sentido de la vida, a ratos me da pereza que todo se complique a la vez... Abracito!

moscardon diesel dijo...

parece que Romeo lo tiene claro y no quiere volver atrás (¿para qué reversa entonces)seguramente lo que viene te hará aun más feliz :)

Julibelula dijo...

O_O Querido Moscardón qué puedo decir yo ante ese comentario???
Un abrazo