Cuando te veo, me da una sensación rarísima debajo del ombligo.
Y te imagino muy cerquita, donde pueda olerte y tocarte con las pestañas.
Y me muero de las ganas de meterte muy adentro de mí, sentirte así, prisionero de mi deseo, compañero de mi deseo, dueño de mi placer.
Y abro los ojos, me muerdo los labios y me quedo en silencio. Pero que me da una sensación rarísima debajo del ombligo cada vez que te veo, me da.
6 comentarios:
Upaaaa
Muy chévere.
Saludos.
Vaya jodida sensación, deliciosa y peligrosa. Afortunado quien la produce en tí. Tocar la piel ajena con las pestañas, eso es estar muy cerca. Me gusta. Me gusta.
Un abrazo.
bendita seas tu y quién sea la persona destinataria de tan dulce mensaje
A quien no Juli... me alegra leerte bien.
un abrazo
:D
Juguito, me alegra mucho que te haya gustado!
Gabriel, sí que es una sensación llena de adjetivos, pero me encanta!!!
Moscardón, gracias por las bendiciones. Espero que se multipliquen y regresen a vos.
Clau, sí estoy bien, estoy muy animada y bueno... con el tiempo se verá qué pasa!
Uff y que maravilloso es sentirse así!
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